domingo, 20 de mayo de 2012

24

No hay plazo que no se cumpla... mejor dicho, cumpleaños al que no se llegue lleno de aprendizaje por el tramo de vida recorrido a lo largo de 365 días (en esta ocasión de 366 por eso del año bisiesto), en fin... El caso es que ha pasado de todo a lo largo de ese tiempo... reencuentros, despedidas, lagrimas y risas, tantas cosas... Caramba, el tiempo si que se pasa "volando".

Despierto a la mañana y recuerdo -¡Hoy es día de mi cumpleaños!...

Es inevitable hacer la reflexión, la retrospectiva de lo que me quedó y los retos que habrán de seguir cocinándose a fuego lento... el sazón en los mejores platillos se obtiene en base a la cocción pausada... dejando que los olores se mezclen entre sí... así es como poco a poco vamos construyendo esas nuevas metas por alcanzar.

Me acerco al espejo que está colocado por encima del lavamanos en el baño... la barba que creció del día anterior, los ojos algo cerrados aún, la mueca de risa... todo eso enfrente de mi me deja ver que los años se empiezan a reflejar en mi rostro... Todavía recuerdo cuando tenia escasos 5 años y jugaba con la navaja de afeitar de mi papá a que me rasuraba como lo hacía él... y pensar que en la actualidad si no lo hago diario, sigue creciendo la barba, cual pasto en el campo, sin control alguno... 

Sigo "curioseando" mi rostro... comparo las imágenes de fotos de algunos años atrás y me doy cuenta que las gesticulaciones se van haciendo cada vez mas duras, las expresiones se van tornando mucho muy diferentes a las de aquel pequeño escuincle que se rompía los pantalones cuando jugaba fútbol con la pandilla... me asombro de los "grandes cambios" que he sufrido en unos cuantos años... ¡y los que aún faltan por recorrer!... de lo que falta por hacer y de los lugares que no he conocido... es algo temprano en mi vida, digo yo...

Ya mas relajado, con el silencio habitual de un "domingo por la mañana", comienzo a cavilar cada una de las estrategias que habrán de iniciar de inmediato para llegar a los fines propuestos. -Es aún temprano, vuelvo a repetirme...

¡Carajo! 24 años después de aquella mañana del viernes 20 de mayo de 1988... sigo siendo parte de la rotación de la tierra cada 24 horas durante los últimos 8760 días de historia terrícola!!! eso de nacer en año bisiesto es la mera onda!!! 

Para empezar, lo que ahora pretendo es seguir aprovechando estos 365 días que vienen por delante... a seguir cultivando para que la cosecha sea benévola... 

... Para todos aquellas personas que han estado conmigo en este año de vida que termina y en éste que inicia, les agradezco con todo el corazón por su paciencia, sus palabras, sus regaños y sus aplausos... también por estar ahí en los momentos en que fue necesario hacer presencia... 

Oficialmente hoy, cumplo 24 años... a luchar y trabajar para llegar sanos y cuerdos al cuarto de siglo, que no!

Me voy, que si no me dejan sin rebanada de pastel y la neta esta muy bueno!!! jejejejeje!!!!

Carlo Moreno-Jiménez (el Andariego)
Ciudad de México, Distrito Federal, a 20 de Mayo de 2012

jueves, 10 de mayo de 2012

En tu día... Y todos los días... ¡GRACIAS MAMÁ!

Es adecuado cualquier momento para decirle a nuestras madres cuanto las queremos, cuanto les admiramos... un solo día no basta para agradecer los desvelos, las veces en que nos arroparon en una noche fría con esos cobertores que nos acompañaban a la hora de dormir... de las veces en que llegábamos hasta tarde a casa... esas largas madrugadas en que no podían despegarse de nosotros cuando la tos y la fiebre nos invadían el cuerpo... Son tantas las veces en que nuestras madres, con el carácter que las distingue, darían todo con tal de ver que sus hijos tengan lo mejor... Son como leonas que defienden a sus pequeñas crías... Sin lugar a dudas, muchos de nosotros podríamos decir ¿qué sería de mí si no te hubiera tenido aquí, a mi lado?

EL valor de una Mamá es incalculable, como lo podrán saber. También aquellas mujeres que hacen las veces de madre adoptiva y cuidan de aquellos que no tuvieron la fortuna de conocer a sus progenitoras por cualquier razón o condición impuesta por la vida... Sus enseñanzas, siempre buscando encaminar nuestros pasos que desde pequeños cuidaron y que con el transcurso de los tiempos han vigilado constantemente a nuestro lado... En verdad, repito, no nos alcanzaría la vida para agradecerles lo que hacen por nosotros... ¡Jamás!

La verdad es que, como lo pueden constatar, el día de hoy en que escribo estas breves lineas, recuerdo como todos los días que la veo, las ocasiones en que mi madre ha estado a mi lado apoyándome en mis locuras, en los episodios de descontrol, en mis épocas de fracasos y en los tiempos de cosechas en los que, de poco en poco, voy recogiendo una parte de los frutos que me han dejado sus consejos atinados, sus gritos y regaños (los cuales agradezco), las risas y las lagrimas... todo eso es lo que me hace escribir aquello de que "El valor de de una madre es incalculable".

El simple hecho de tener el privilegio de contar con una Madre como la mía, de verdad, no repararé nunca en agradecer a la vida. El tesoro más grande que tengo la fortuna de poseer... Grandes lecciones que me ha dado "la patroncita" como suelo llamarle cariñosamente a mi mamá y que, a sus formas y modos, he aprendido a querer y a respetar. 

A pesar de que en la actualidad los tiempos de convivenvicia son un tanto limitados, nunca pierdo la ocacion para decirle que le quiero mucho, de darle un beso en la frente, como signo de respeto y de cariño ademas de que, cada que se puede, suelo invitarle a salir a tomar un café para platicar de las dudas existenciales que aún me aquejan... a las cuales siempre tiene una respuesta, en veces abstracta... en otras clara y fuerte...

En fin, a todos ustedes, mis amigos, solo puedo decirles unas cuantas cosas acerca del tema que estoy tratando esta vez:

Si tienen aún a su mamá, si tienen la dicha de seguir probando sus guisos, de escuchar sus gritos, de verle antes de salir a la escuela o al trabajo... si aún la tienen a su lado, no dejen de darle ningún día una muestra de su cariño más sincero. Un beso y un abrazo que se da de corazón, tiene mas valor aún que cualquier articulo lujoso o una invitación a comer por compromiso en este día tan singularmente llamado "Día de las Madres". El mejor regalo que pueden recibir de nuestra parte es que nos vean bien, sanos y realizando los sueños que compartimos con ellas cuando eramos pequeños... esos son los premios que una madre puede recibir a cambio de todos los esfuerzos realizados.

Para aquellos de ustedes que, aunque físicamente no tiene a su madre en este nuestro plano terrenal, no las dejen ir de sus pensamientos, de sus oraciones y de sus corazones, porque doquiera que se encuentren los seguirán cubriendo entre sus brazos que los apretaran para abrazarles o para limpiar sus lagrimas... 

Brindemos pues, por nuestras madres, que sin ellas simplemente el mundo sería algo distinto a lo que conocemos.

A mi madre, en su día y todos los días no basta decirle felicidades.

... mas bien te digo ¡GRACIAS MAMÁ! 

Hoy, mañana y siempre, tu hijo...

Carlo Moreno-Jiménez (El Andariego)
Ciudad de México, Distrito Federal a 10 de mayo de 2012